Visión"Z" Internacional.: Medios de comunicación de manipulación y adoctrinamiento

“Telebasura, anticultura, modernidad líquida y otras armas de manipulación masiva. Ahora, no es muy difícil diferenciar si los medios de comunicación obran como instrumentos de información y diversión o como medios de manipulación y adoctrinamiento”

Por: Giselle Erba- Difusora de sabiduría ancestral.

(República Oriental del Uruguay)

PRIMERA PARTE: Salsipuedes, crónica de un genocidio.

El pasado 11 de abril, conmemoramos en Uruguay el 185 aniversario del genocidio charrúa acaecido en 1831 a orillas del arroyo Salsipuedes.

En aquella nefasta jornada, decenas de charrúas engañados por el primer presidente constitucional del Uruguay el Gral. Fructuoso Rivera,quien los había convocado al mencionado lugar, diciéndoles que el ejército nacional los necesitaba para una incursión militar acudieron sin saberlo al sitio escogido donde serían asesinados sus más aguerridos hombres y familias.

Los bravíos charrúas quienes habían sido parte de la Guardia Militar del Prócer José Artigas en épocas de la revolución oriental, fueron doblegados y reducidos por un vil ardid orquestado por las políticas de exterminio de las poblaciones originarias que en ese momento estaban siendo ejecutadas en las jóvenes naciones del continente.

Si bien Salsipuedes no fue el único caso, se diferencia de los demás por su crueldad ya que los charrúas no solo fueron víctimas del engaño. Este episodio tiene un ingrediente aún más perverso que es digno de ser analizado.

A continuación transcribo algunos párrafos de la Carta de Manuel Lavalleja relatando el episodio de Salsipuedes porque refleja con claridad la “cabeza” imperialista, que aún sigue operando (aunque formateada y actualizada) hasta nuestros días.

“Muy fácil le fue a Rivera poner a los indios en masa para darles el golpe de muerte que les tenía preparado en campos de Salsipuedes; sin embargo los charrúas, antes de marchar e incorporársele, consultaron si debían o no hacerlo y hubo dos de ellos que no se conformaron tomando la invitación como sospechosa.

Ellos fueron el cacique Polidoro y el Adivino. Ambos y las familias de ellos, con sus tolderías se separaron de los otros y se pusieron en marcha hacia el Cerro del Pintado.

Los demás llegaron una hora antes del amanecer. Hacía mucho frío y el oficial los hizo entrar a todos a la cocina. Les proporcionó yerba, carne, bebidas y todo lo que pudieron ofrecerles para tenerlos en descuido total.

En ese momento, estaba el capitán en otra pieza, preparando las armas para fusilarlos. Los indios al entrar a la cocina, dejaron sus armas del lado de afuera, a sugerencia del oficial que los acompañaba. Uno de ellos que llevaba su carcax no había soltado su arco, por consiguiente, era el único armado.

Atacaron a fuego vivo por la puerta y la ventana de la cocina a los indefensos que rodeaban el fogón; mientras que el del carcax hizo uso de él hasta que lo voltearon…

Este triste episodio de la historia nacional que fue ocultado por mucho tiempo y que aún sigue siendo negado y justificado por la fracción más conservadora de la europeizada sociedad uruguaya, es una herida abierta en la memoria de nuestro pueblo que aún no ha podido cicatrizar.

A lo largo de 200 años modelos imperialistas de dominación similares se han venido replicando. Muchos ejemplos podríamos mencionar en este artículo; sin embargo hoy nos vamos a enfocar en los métodos que se aplican en la actualidad con el fin de desestabilizar gobiernos democráticos y también para mantener a las masas dormidas y en estado de distracción, descuido e indefensión.

SEGUNDA PARTE: Anticultura, telebasura, modernidad liquida y otras armas de manipulación masiva

“Si no estáis prevenidos ante los medios de comunicación; os harán amar al opresor y odiar al oprimido” Malcom X

Aclaro que no es el objetivo de este análisis demonizar las herramientas tecnológicas de comunicación de las que disponemos en la actualidad, pero sí haremos énfasis en el uso que le dan aquellos, que detrás de las sombras, aún permanecen en la punta de la pirámide valiéndose del esfuerzo de los millones de personas que están en la base sosteniendo el sistema.

Ya lo decía Herbert Marcuse; que en un tiempo no muy lejano iba a ser muy difícil discriminar si los medios de comunicación obrarían como instrumentos de información y diversión o como medios de manipulación y adoctrinamiento.

Ciertamente, la línea es muy delgada y el límite entre ambas conceptualizaciones es prácticamente imperceptible.

Al igual que ocurrió en Salsipuedes, los medios masivos de comunicación manejados por la elite al servicio del nuevo orden mundial, nos convocan a su fiesta de “modernidad líquida” un caldo donde nuestra cultura originaria es licuada con elementos foráneos que nada tienen que ver con su significado original.

Anticultura / contracultura: Tal es el caso del sincretismo religioso y cultural, impuesto por el sistema colonizador y cristiano que fue borrando con habilidad las tradiciones originarias por el modelo predominante en occidente. Los españoles, que ya habían sido testigos y sujetos del sincretismo religioso por las religiones que los moros y otros pueblos habían traído a la península ibérica, sabían cómo hacerlo y así lo concretaron.

TELEBASURA: Los sociólogos y analistas que estudian el comportamiento de masas, afirman que es necesario hacer una distinción entre telebasura fabricada y telebasura desvelada.

«Telebasura fabricada» es aquélla que tiene su origen en el proceso de producción de los contenidos televisados con un fin predeterminado que puede ser: desinformar, mostrar una sola versión de los hechos de la realidad, distraer o entretener en exceso para que la población no desarrolle su sentido crítico ni se involucre en la política de su país, promover la predominancia de un pensamiento único , inducir el consumo y / o practicas esclavizantes; pornografía, sexo, drogas, comida chatarra, chismes, etc.

«Telebasura desvelada» en cambio es la que no está fabricada por la televisión, pero que se limita a «ofrecerla» a la audiencia, y a «ponerla en escena» deliberadamente para fomentar, miedo, pánico, desconfianza y conseguir con ello que la balanza de la opinión pública se incline para un solo lado. Un ejemplo de esto son los noticieros que dedican largas horas de programación, televisando los hechos de la crónica roja y noticias desalentadoras. Asesinatos, violaciones catástrofes y crímenes de toda índole son televisados con total impunidad, enrareciendo el clima y creando un sentimiento de indefensión y un estado mental de paranoia y psicosis colectiva desenfrenada.

Por razones de espacio, dejaremos para el próximo número el análisis de la influencia que ejercen las redes sociales en la psiquis colectiva y otras armas de manipulación masiva que están siendo utilizadas para desestabilizar gobiernos, y como ya hemos repetido muchas veces pero no nos cansamos de reiterarlo, para mantener a las masas durmiendo en la burbuja del “Mundo feliz” que describiera magistralmente Aldous Huxley.

Sin dudas que el tema amerita que sigamos profundizando estos conceptos. Como humanidad habitante de los pueblos en vías de desarrollo ubicados en el horizonte cultural de Sudamérica, nos toca ahora la difícil tarea de forjar ya no la revolución por la independencia del territorio más si, la revolución por la independencia y la libertad de un bien aún mayor, la CONSCIENCIA CRÍTICA Y EL LIBRE PENSAMIENTO.

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